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martes, 30 de diciembre de 2014

IDEA PARA LAS 12 UVAS DE FIN DE AÑO


Termina un año y comienza otro. Si queréis darle un toque especial y festivo a este momento (si es que las doce campanadas pueden ser aún más festivas de lo que ya son de por sí), aquí traigo una idea de presentación de las uvas de la suerte que se puede hacer con niños.

(Este post también lo podréis ver en www.chefjunior.com.es/blog/):


Esta idea surge de unos ornamentos navideños suecos con forma de corazón, que lo mismo habéis  visto alguna vez en Ikea. Este es un vídeo de cómo hacerlos con tela de fieltro (en inglés):



Yo los he adaptado para que se puedan usar como envoltorio/recipiente para 12 hermosas uvas de la suerte. Para ello, he hecho uso de cartulinas de colores y he ampliado las dimensiones del corazón - es que yo tengo un corazón muy grande ;) -

Necesitamos:

- Cartulinas de colores (estaría bien que contásemos con alguna dorada o plateada, para darle un toque más festivo)
- Tijeras
- Regla
- Papel transparente de envolver regalos
- Cinta o cordel para atar

Pasos:

1. Cortar la cartulina en rectángulos alargados. Mi consejo es cortar un rectángulo en el que el lado más largo sea 3 veces el tamaño del pequeño. Por ejemplo, las dimensiones de mi enorme corazón son:

12 x 36 cm

En esta caso lo he hecho muy grande para que me quepan las 12 uvas, que tienen un tamaño hermosote (ya veremos a ver qué tal caben en la boca, si no nos atragantamos).

Pero también se pueden hacer medidas más pequeñas:

10 x 30 cm
8 x 24 cm
6 x 18 cm
5 x 15 cm

2. Los corazones se pueden hacer de varias tiras. En el de la foto principal yo lo he hecho de 2 tiras, que da 4 cuadrados. También se puede hacer de 3 tiras, que da a un corazón de 9 cuadrados. Mi consejo: empezar por el de 4 cuadrados, es más sencillo de hacer (especialmente si lo estamos haciendo con los niños) y nos sirve para ir practicando. Cuando hayamos conseguido destreza, podemos ir a por el de 9 cuadrados (3 tiras). Para el de dos tiras haremos un corte en el medio del rectángulo y para el de tres tiras haremos dos cortes (como se ve en las fotos):



Para el que se atreva con el de 3 tiras, aquí tiene un resumen muy resumido de los pasos a seguir:



3. Entrelazamos los dos rectángulos de diferente color. Esta es la parte complicada del asunto. La forma de hacerlo es empezar entrelazando por arriba hacia abajo y de interior a exterior del corazón. Con tela de fieltro quizás resulte esta operación más sencilla que con la cartulina. Con la tela es más fácil hacer dobleces mientras que con el papel deberemos tener cuidado para no hacer arrugas que queden luego marcadas.

4. Rellenamos el corazón con 12 uvas. Sobra decir que son 12, ni 11 ni 13. Una forma sencilla de contar las uvas y no equivocarnos es ponerlas en 3 grupos de 4 (como en la foto). Así, de un vistazo, vemos que ni nos sobran ni nos faltan.


5. Envolvemos el corazón con papel transparente de regalo. Mucho cuidado al hacer esta operación, porque se nos puede deslizar alguna uva fuera del paquete, sin que nos demos cuenta, y entonces se nos irá al garete nuestro conteo meticuloso de las cantidades.


6. Cerramos el paquete con una cinta o cordel y lo atamos. Unos momentos antes de que suenen las campanadas, lo repartimos entre los invitados. Y ya que cada uno se las apañe con sus uvas. Nosotros hemos hecho nuestro trabajo.



7. Comerse las uvas. Aunque todos los años nos lo vuelven a explicar una y otra vez, una y otra vez, una y.... ¡Qué cansinos! ¿Aún queda alguien que no sepa que son los cuartos y qué las campanadas? Consejo: acordaos lo que paso en el año 89 con el lío de los cuartos y las campanadas. No os equivoquéis. Y si no, tampoco pasa nada. Trae buena suerte equivocarse al tomarse las doce uvas.


¡Feliz Año 2015!





lunes, 22 de diciembre de 2014

TOSTADAS MELBA NAVIDEÑAS PARA HACER CON NIÑOS


Estas tostadas son tan fáciles de preparar que hasta un adulto podría hacerlas. 

No es una receta más, sino que es la receta para pasar una tarde navideña divertida y en familia. No hay nada que guste más a los niños (y a los mayores) que dejar rienda suelta a la creatividad con un trozo de masa y figuras para manejar libremente.

Aquí vais a encontrar ese juego perfecto para que los niños y los mayores se involucren en la cocina de una manera simple y que no requiere supervisión de si lo hacen bien o no, de si van a manchar todo de harina o de cuál será el resultado final (todos nos acabamos poniendo un poco nerviosos a veces con tantos preparativos para Navidad).

Estas tostadas solo tienen un inconveniente y es que, están tan buenas, que según van saliendo del horno no hay quien se resista a ellas. Son adictivas. Corremos el peligro de que no llegue ni una a la cena.

Son perfectas para untar con paté, quesos, acompañar ahumados. O simplemente, comerlas solas. Porque están riquísimas.

Como ya sabéis, esta es una entrada compartida con el blog chefjunior.com.es/blog. Os invito a que también os deis una vueltecilla por allí.



Y además, no hace falta grandes cosas. Solo necesitamos:

- Pan de molde
- Rodillo o una botella de cristal que también se puede usar como rodillo
- Cortapastas de diferentes tamaños y formas


Preparación

1. Con un cuchillo, quitamos el borde del pan.
2. Aplanamos la rebanada del pan con el rodillo, apretando bien fuerte.
3. Giramos la rebanada 90º y volvemos a repetir la operación.
4. Damos la vuelta al pan y pasamos el rodillo una tercera vez. Lo que queremos es que el pan nos quede bien prieto y firme, como si fuera una hoja gruesa de cartulina que la podamos manejar a nuestro antojo.
5. En este punto, es donde viene lo divertido y dejamos rienda suelta a nuestra imaginación, sin restricciones. Es un juego y lo queremos pasar bien.
6. El horno lo tendremos caliente, a unos 180º y sobre la bandeja colocamos papel para horno, papel de aluminio o un silpat, para que se nos peguen las tostadas a la bandeja y sea más fácil su retirada.
7. Cuando tengamos una bandeja llena, las metemos al horno y las dejamos unos cinco minutos. Es MUY  IMPORTANTE estar pendientes del horno, ya que estas tostadas se nos pueden quedar con facilidad en muy poco tiempo. En un momento parece que les queda aún, te das la vuelta y cuando vuelves a mirar se han quemado.

Para ello, debéis tener en cuenta que las figuras pequeñas se cocinarán antes que las grandes. Por lo que es muy fácil que se nos quemen las pequeñas mientras las grandes aún no estén. RECOMENDACIÓN: prepara varias bandejas de horno. Por ejemplo, una con tostadas grandes, otra de tamaño mediano y otra de figuras pequeñas.





domingo, 21 de diciembre de 2014

5 RAZONES PARA UN REGALO "HAZLO TU MISMO" Y 7 FORMAS DE PASAR LA NAVIDAD


Hoy es 22 de diciembre y mientras escribo estas líneas se está produciendo ese acontecimiento astronómico que se conoce como solsticio de invierno y que el ser humano ha venido celebrando desde hace milenios (al menos en el hemisferio norte).

Aquí en España también tenemos nuestra lotería de Navidad y es el día del año en el que más gente se siente sana y con salud. 

Y de aquí al día 24 de diciembre, Nochebuena, no dejaremos todos de felicitarnos la Navidad y desearnos que pasemos una feliz noche.

Por eso yo quiero aprovechar esta entrada para felicitaros la Navidad. He hecho un pequeño vídeo navideño, de mi libro, que espero que os guste y en el que doy 7 breves ideas para pasar esta Navidad. Dura cosa de un minuto y espero que al menos os dibuje una sonrisa (aprovecho para recordaros mi otro blog en www.chefjunior.com.es).


Y en Navidad también es tradición hacerse regalos. Por eso os dejo aquí un regalo virtual, un regalo HTM (abreviatura de "Hazlo Tú Mismo", versión española del DIY "Do It Yourself"), que ahora están por todos lados en la blogsfera.

Como el otro día puse aquí la receta de unas galletas navideñas , os he preparado estos tarros para regalar.


En estos días de tanto consumismo y que tan materialistas nos hemos vuelto todos, algo preparado por nosotros mismos y con nuestras propias manos debería tener más valor. Por eso, creo que existen tres razones para hacer un regalo como este (si pensamos, seguro que encontramos más):

1. En ello hemos empleado algo mucho más valioso que el dinero: nuestro tiempo, que es el bien más preciado que poseemos y que nunca volveremos a recuperar. Obsequiar a alguien con parte de nuestro tiempo es un gran regalo.

2. El mensaje que enviamos al destinatario del regalo es: "me importas y por eso he empleado una tarde en la cocina haciendo estas galletas caseras y me he molestado en ponerlas en un envase bonito, cuando podría haber ido a cualquier tienda y comprarte cualquier cosa Made in China que lo mismo ni te hubiera gustado".

3. ¿A quién no le gustan unas galletas caseras? Muchas veces empleamos tiempo, dinero y gelocatiles (para el dolor de cabeza) en comprar regalos que a la otra persona no le van a gustar. Es cierto va a ser muy difícil sustituir un regalo caro por un tarro de galletitas. Pero en regalos más simples, como el de un regalo del amigo invisible en la oficina: ¿no es mucho más seguro acertar con algo que le gusta a todo el mundo?

4. Sirve pare reciclar material: tarros de conserva, papeles de regalo viejos, retales de tela, cordeles ... Y estoy seguro que a muchos de los que leéis esto se os ocurren muchas más ideas que a mí.

5. Es una ocasión excepcional para practicar en la cocina, sobre todo si, como en mi caso, no tienes niños en casa u otras bocas hambrientas que se vayan a comer esa cantidad ingente de galletas, muffins, bizcochos, tartas, etcétera, etcétera y etcétera, que te mueres por preparar y que sabes que si lo haces para ti solo acabará engrosando tus cartucheras. Cualquiera a quien le guste la cocina de verdad sabe que no hay mayor placer que compartir lo que sale de ella.

Como he dicho más arriba, seguro que hay muchas más razones para hacer un regalo HTM "Hazlo Tú Mismo" (gastronómico, como este, o de otro tipo).  Pero creo que estas cinco sirven para convencer... si es que hace falta convencer a alguien.



Cómo preparar un tarro de galletas para regalo HTM

Necesitaremos:

- Galletas caseras
- 1 Bote de cristal (de mermelada, de mayonesa, etc,)
- Papel de envolver
- Cordel o cinta
- Cartulina

1. Para empezar, antes incluso de ponernos a amasar las galletas, tenemos que comprobar que estas nos van a entrar por la boca del bote de cristal. Parece de perogrullo, pero no lo es tanto. Nada sienta peor que hacer las galletas y darse cuenta que (una vez hechas) no entran en el tarro. A mí no me ha pasado, pero con lo despistado que soy a veces, bien podría haberme ocurrido.

2. Sacamos los diferentes tamaños de cortapastas que tengamos y vemos cuales puedan entrar. No elijáis uno que entre justo, pues una vez cortadas y en el horno, las galletas tenderán a expandirse. Escoged aquellos que entren en el tarro con holgura.

3. Lavamos el tarro. Para quitarle las pegatinas, con agua bien caliente. Hay algunas que se resisten, yo creo que a algunos fabricantes les debe sentar mal que se reciclen sus envases y les ponen etiquetas imposibles de quitar. Cuando veo que alguna se me resiste al agua caliente, tomo el estropajo nanas y ¡oye!, salen corriendo. Lo malo es que luego el estropajo queda todo pegajoso.

4. Colocamos las galletas dentro y cerramos la tapa.

5. Elegimos un papel de regalo que nos guste. O una tela, pero como yo no soy de manejar retales, pues uso papel que es mucho más socorrido. Para este tipo de cosas, viene bien guardar el papel de regalos usados y reciclarlos para estas cosas. Utilizando la tapa como plantilla, podemos cortar un círculo, teniendo siempre cuidado de cortar un redondel unos centímetros de diámetro mayor que la tapa. 

6. Colocamos el papel sobre la tapa y lo sujetamos con una cuerda o cinta, atamos con firmeza y con la maña y destreza que nos caracteriza, hacemos un nudo más o menos "apañao".

7. Escogemos una cartulina, la recortamos a modo de etiqueta, le hacemos un agujero con un perforador y la colgamos de la cinta con la que hemos cerrado nuestro regalo HTM.

Y ahora ya solo queda entregar nuestro detallito.


¡Que paséis una Feliz Navidad! 

viernes, 19 de diciembre de 2014

GALLETAS DE NAVIDAD



Es la primera vez que hago galletas. Y no me han quedado del todo mal, aunque tampoco muy bien:
  1. Porque a mi lo de amasar con rodillo se me da bastante mal. No soy de trabajo muy fino y dejar la masa nivelada y con forma regular, como que me cuesta. 
  2. Porque se me quemaron algunas. Y si no ando listo, se me hubieran quemado algunas más. Si queréis, os propongo un juego, como el de "buscar a Wally": buscar la galleta quemada en las fotos.
  3. Porque lo de trabajar con la glasa está visto que no es mi especialidad, vuelvo a repetir que salta a la vista que yo no soy muy fino trabajando y disto mucho de ser un perfeccionista. Eso sí, las galletas han quedado con un aspecto muy rústico.

Los que seáis padres sabréis que a un niño le gusta más un cortapastas que a un conejo una lechuga, y el que no se haga la idea, que vea el anuncio de Ikea de este año y entenderá por qué hacer galletas en familia puede ser toda una aventura (limpiar la cocina después también es una aventura):




Ingredientes

- 175 grs. de mantequilla (a temperatura ambiente)
- 275 grs de azúcar glas
- 1 huevo
- 1 yema de huevo
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- 1 ralladura de un limón
- 1/4 de cucharada de sal
- 275 grs de harina

Para la glasa de decoración:

- 1 clara de huevo
- 200 grs de azúcar glas
- 1/2 cucharada de zumo de limón



Preparación de las galletas

1. Sobamos la mantequilla (como se diría en mi pueblo). Es decir, la batimos hasta que quede bien cremosa.
2. Añadimos el azúcar a la mantequilla hasta que la mezcla quede suave.
3. Incorporamos el huevo y la yema, más la vainilla, la sal y el limón.
4. Poco a poco, y usando un cucharón, vamos echando la harina.
5. Guardamos la masa en la nevera durante 30 minutos (yo, por ejemplo, lo guardé en un rollo de film para que no se reseque). La masa tiene que quedar dura para que se pueda trabajar.
6. Extendemos la masa sobre una superficie enharinada y amasamos con un rodillo hasta alcanzar el grosor deseado.

En este punto puede sucederos como a mí (¿he dicho que es la primera vez que hago galletas?). O que no hayáis dejado la masa suficiente tiempo en la nevera y no la podáis trabajar. En ese caso, vuelta a la nevera y a esperar (o si tenéis prisa, un ratito de congelador siempre ayuda a acelerar los procesos para los que somos impacientes). O bien, que la masa esté blanda porque le falte harina y sea necesario incorporar un poquito más, hasta que la podamos trabajar. La dos cosas me sucedieron a mí.

7. Con un cortapastas, vamos cortando las galletas. Los bordes no utilizados, los retiramos y creamos una nueva bola de masa para seguir pasándole el rodillo, extendiendo, etc (como en el día de la marmota pero en versión masa de galletas)
8. El horno tiene que estar a 180ºC, metemos las galletas durante 8 minutos y os aconsejo estar pendientes para que no se os quemen, porque un momento miras y crees que aún le quedan, te das la vuelta, y cuando vuelves a mirar se han quemado.





Para hacer la glasa

1. Batimos la clara, no tiene que llegar a punto de nieve.
2. Añadimos el zumo e incorporamos el azúcar glas poco a poco. Hasta que quede una masa que podáis identificar como glasa para decorar galletas.

No soy experto en estas cosas, hay varios tipos de glasa. Si alguien quiere saber más, lo advierto, no soy el indicado (de momento

Advertencia: Yo he utilizado clara de huevo natural (de huevo fresco, eso sí). Nada de pasteurizados del Mercadona ni polvos de esos. No quiero que nadie piense que hago apología de la salmonelosis o que juego a la ruleta rusa de las intoxicaciones alimentarias. Antes de ponerme con el asunto de la glasa miré en varios blogs para enterarme un poquito, y todos hablaban de los riesgos de usar huevo crudo. Alguno era tan tremendista que hasta me he llegado a sentir mal por usar huevo normal. Eso está bien. Hay que ser consciente de lo que uno prepara y de los riesgos que ello conlleva (para tomar precauciones). Es verdad, que si yo quisiera vender estas galletas podría hacerlo, pues ahí si que tendría que usar clara pasteurizada o polvo (en aras de la salud pública).







sábado, 6 de diciembre de 2014

BIZCOCHO DE YOGUR PARA UN CUENTO DE NAVIDAD Y SORTEO DE LIBRO "CHEF JUNIOR"

La Navidad (o el Hannukah, o el solsticio de invierno, o la Saturnalia, o Yule, o las vacaciones de diciembre, o las fiestas, o como cada uno quiera llamarlo)... ya están aquí.

Ya estamos desempolvando el árbol, haciendo recuento de las bolas que se han roto, desenredando nudos imposibles en las guirnaldas de luces (que dan ganas de coger una tijera y cortar por lo sano)... y, encima, pensando en qué cocinar para estas fiestas.

En nuestra cabeza se amontonan los platos complicados, los ingredientes navideños, las recetas especiales.... porque todo en estas fechas tiene que ser especial y tiene que tener un toque festivamente navideño. ¿Porque si no? ¿Para que viene la Navidad?

Esta receta parece poco navideña, sé  lo que estáis pensando. Un bizcocho de yogur puede prepararse en cualquier época del año. Pero este no es un bizcocho de yogur común. 

¡Es que resulta que esta receta es la del bizcocho preferido de Papá Noél! 


Tal y como lo estáis leyendo. 


A través de los servidores y desde vuestros IPs me llegan hasta aquí vuestras reservas y caras de incredulidad. Pero es así. La receta se la dio la propia Madamé Cruasané a Papá Noél, y para averiguar el motivo lo único que hay que hacer es ponerse a leer "Un cuento de Navidad" que está incluido en el libro "Chef Junior y el libro de las recetas con cuento" (de venta en ebook y en papel en la tienda de Amazon - Amazon.es o Amazon.com)

Para los impacientes, aquí va una vídeo receta de cómo se prepara:





Ingredientes

- 1 Yogur relleno de aceite
- 2 Yogures rellenos de azúcar
- 3 Yogures rellenos de harina
- 1 Yogur relleno de yogur
- 3 Huevos
- 1 Sobre de levadura (16 grs)
- Ralladura de 1 limón
- Mantequilla y harina para engrasar el molde
- Azúcar glas para decorar


SORTEO EJEMPLAR FIRMADO

Por último, para celebrar todo esto (la Navidad, el bizcocho, el lanzamiento del libro... se admiten más sugerencias de celebración), voy a proceder a sortear un ejemplar firmado por el autor (o sea, yo). Para participar en el sorteo, es muy sencillo:

1. Dejad un comentario en este post contestando a esta pregunta: ¿A quién le regalarías un Chef Junior? ¿O a quién crees que le vendría bien pedírselo a Papá Noel o a los Reyes Magos?
2. Importante: un email de contacto y nombre del participante, para poder contactar en caso de ser ganador.
3. No hay límite de comentarios, podéis escribir tantas veces como queráis. A cada comentario le asignaré un número para el sorteo, de modo que una misma persona pueda participar con tantos números como comentarios haya dejado (siempre que cada comentario cumpla los puntos 1 y 2).

El sorteo lo realizaré el próximo viernes día 12 de diciembre, entre todos los comentarios que se hayan dejado en este post hasta las 00:00 horas del viernes (hora local de Madrid, por si las dudas).

El premio:

¡Un ejemplar firmado de "Chef Junior y el libro de las recetas con cuento"!





ACTUALIZACIÓN EL DÍA 12/12/2014 A LAS 00:30

Bueno, pues cumplido el plazo, no he querido esperar mucho para celebrar el sorteo y salir de dudas ¿Quién se lleva un Chef Junior a su casa?

Redoble de tambores, Trrrrrrrrrrrrrummmmmmm!!



El número 14 corresponde a Joan Masgoret Sexmann ¡ENHORABUENA! Ahora le toca a él realizar un nuevo sorteo para ver cuál de sus tres hijos se va a llevar el regalo.

Muchas gracias a todos los que habéis participado en el sorteo.